martes, julio 25, 2023

Ese Gran Final... Live a Live




Al alcanzar la cima del Paseo del Arconte, la estatua que lo decora parece no reaccionar a nuestra llegada. Sin embargo, al intentar marcharnos, es cuando Odio reclama nuestra atención y hace acto de presencia.


Esto tiene muy buena pinta, porque claro, no es el típico juego en el que te enfrentas al malo después de haberle visto en dos escenas contadas o te cuentan su pasado a través de un cutre flashback. ¡No! Aquí hemos controlado directamente al malo final, y lo peor de todo, es que hemos visto qué no ha hecho nada malo. Él se ha portado bien con todo el mundo, pero su rival le ha traicionado por envidia, le ha engañado para que mate al rey haciéndole creer que es un monstruo con un genjutsu, su pueblo le ha tachado de traidor después de semejante afrenta, y por último su mujer se ha suicidado delante de sus ojos, después de reconocer en secreto que estaba enamorada del rival. Es que no me jodas, me pasa eso y me vuelvo malo yo también xD 

Odio, o mejor dicho Oesterd, empatiza mucho con las personas que se esfuerzan mucho pero no logran llevar a cabo sus objetivos. Por eso ayudó a los enemigos de cada una de las rutas. De hecho, puedes elegir jugar el final también con el malo y se trata de apoyar a los antagonistas de todas las rutas, jugando los combates finales desde el otro lado y derrotando a los protas. Veamos ahora si Oesterd puede con los personajes que sus colegas no pudieron derrotar. 


Terminada la conversación, Odio se transforma en un bicho asqueroso con varias partes. Una ceja, dos ojos, y unas fauces, que tendremos que combatir al mismo tiempo. Es la hora de comentar el sistema de combate.


Live a Live tiene un sistema de combate por turnos en una pequeña cuadrícula, pero no es un SRPG. Además de utilizando los diferentes comandos, el tiempo también transcurre cuando haces un movimiento dentro del tablero, permitiendo que los enemigos puedan hacer lo mismo, como en Makai Shin Trillion.

Pero la verdadera gracia del sistema de combate está en que no hay ataque normal. Todo son habilidades de diferente índole, elemento, potencia y tiempo de carga. No hay barra de magia, por lo que la única razón para escoger una u otra será el tipo de enemigo que tengas delante y cuanto estés dispuesto a esperar a cambio de causar más daño. Puedo ver, también, que al estar en combate contra varios enemigos, cada uno tiene sus propias fortalezas y debilidades, permitiéndonos aprovechar bien a todos los personajes y sus diferentes ataques.


Los siete personajes están bien diferenciados y escoger en el party uno u otro será tu elección. Únicamente hay un problema con Cube, porque no sube de nivel. Hay que recoger unas piezas para doparle porque es un robot, y son muy difíciles de conseguir. No pasaría nada si no fuera por el hecho de que es el personaje que mejor cura de todos y por tanto es indispensable en el party.


Cada personaje tiene un ataque especial, que se aprende a nivel 16 (sí, los niveles de este juego son bajísimos). Son todos cosas sencillas pero están chulas. A mí la mayoría me han gustado. Además de la animación, también son muy diferentes entre sí en cuestión de área, número de hits, precisión y demás valores a tener en cuenta.


Por su parte, los enemigos son sencillos si cumples una simple regla. No atacar a la ceja. Tiene un autocounter que cura a los otros monstruos y además les bufa en todos los parámetros. La diferencia en el daño que causan y la velocidad a la que te revientan es brutal. Sin el buff, están ahí y hacen sus cosas, pero teniendo un mínimo de cuidado, no son ningún problema.


De hecho, lo peor de todo el combate es, sin lugar a dudas, la canción. Lo primero porque no es un battle theme, es el theme de Odio, y lo segundo porque es una canción orquestal de ésas que parece que estás en misa rezando y no pega una mierda. Duele todavía más cuando sabes que han rechazado usar Megalomania para poner eso... Qué vergüenza...


Cuando derrotamos a los ojos y las fauces, la ceja se abre, revelando al siguiente enemigo. Puro Odio. El único problema es que, a efectos del juego, seguimos en el mismo combate. Esto es importante porque, en este juego, al acabar el combate, todos los personajes se curan y resucitan si hace falta. Más que nada, porque muchos van solos y a veces no tienen ni magia para curarse. Sólo objetos. Pero como oficialmente no hemos salido del combate, no se ha curado nadie ni ha resucitado Cube, el único que había muerto.


El tema de la muerte también tiene su particularidad en este título. Cuando un personaje es derrotado, se queda tirado en el suelo. En ese momento, tienes la posibilidad de reanimarlo con magias u objetos. De hecho, no hay hechizo específico de resurrección, cualquier cosa que cure es suficiente. Sin embargo, en caso de que el aliado abatido reciba cualquier tipo de daño estando postrado en el suelo, su cuerpo desaparece del campo de batalla y ya no puedes traerlo de vuelta de ninguna manera.

Puro Odio sigue en la línea de los enemigos anteriores. Continúa haciendo los mismos ataques, absorbe vida de vez en cuando, puede interrumpir ataques que estés cargando, y además tiene un hechizo que invoca el espíritu de su ex mujer para atormentarte jaja


Pero aún así, somos cuatro contra uno, y llevamos al pistolero, cuyo ataque especial tiene mogollón de hits que se reparten entre una amplia área, aunque tienen baja precisión. En el combate anterior, el daño se repartía entre todos los enemigos, pero ahora, al haber solo uno, se come todas las hostias xD Puede llegar a quitar 999. Es una salvajada.


El battle theme mejora un poco. Mezcla elementos de una canción normal con elementos de las basuras que parecen de una sesión de misa. No sale bien la mezcla.


Al terminar, Oersted recupera su forma original, asume la derrota, y te pide que le mates. Podemos elegir matarle o dejarle vivir. Como es habitual. Vamos a darle a las dos opciones :p


Si eliges matarle, habrá un tercer combate, uno contra uno. Oersted contra el personaje que escogiste para iniciar el capítulo final. Tras el combate, el personaje se sentirá muy mal a pesar de haber ganado. En su interior, sabe que no tomó la decisión correcta. Bad ending.


Si decides perdonarle la vida, directamente coges y te largas del lugar, dejando a Oersted a su suerte. Al llegar a la sala de la estatuas, el resto de personajes que no están en el party hacen su aparición. Parece que ya sólo quedaba presenciar el ending, pero Oersted también hace acto de presencia. ¡Esto no ha terminado!


Oersted coloca a cada personaje delante de la estatua de su enemigo, enviando a cada uno de vuelta a su época. Sí. Nos toca volver a reventar a todos los jefes finales de cada ruta, seguidos y en solitario, para que se mueran todos al mismo tiempo independientemente de la época en la que viven. Vaya deja vu de Sonic 2006 xD


No es para nada difícil, porque los personajes tienen el doble de nivel que entonces, mientras que los enemigos conservan sus stats originales. He aprovechado para cargarme a todos con el ataque especial de cada personaje, pues en aquellos tiempo todavía no lo habían aprendido. El del salvaje oeste ha sido brutal, ha muerto de un ataque recibiendo 999 de daño.








Lo único malo entre comillas, es que los combates son con el battle theme normal de cada ruta. Me duele bastante que vayan a sonar todas las canciones del juego en el final menos la mejor de todas...

Derrotados los jefes de ruta, las estatuas quedan hechas añicos. Viéndose de nuevo en solitario, Oersted absorbe todo el odio del mundo, adoptando una nueva forma. Ahora sí, ¡combate final!


Los brazos y el cuerpo son unidades que actúan por separado, con vida y debilidades propias. De hecho, son bastante puñeteras las dos. Si no te tocan los cojones con cambios de estado, te hacen ataques con los que hay que tener cuidado. Es un combate de esos de ir despacito y buena letra.


Tenemos battle theme nuevo, y esta vez, no es sólo que sea el peor porque es la misma mierda de antes pero además con coros apocalípticos, es que encima han tenido la desfachatez de llamarlo Gigalomania, como si fuera una versión mejorada del mejor theme del juego, y ensuciando su nombre para siempre... Es una lástima que un juego con tan buena banda sonora, pueda tener un final tan malo, musicalmente hablando.


Cuando el cuerpo se queda solo, recurre al fin a su ataque especial. Un rayo de fuego que revienta todo cuanto encuentra a tu paso. 


Pero cuando le queda poca vida, sorprende con un ataque que no quita vida, pero que deja inmovilizados a todos los personajes del tirón. Es como si estuvieran atrapados en lava. Total, que no pueden hacer nada y salen a combatir los otros tres personajes que no estaban en el party.


Fuaaahh... Menos mal que estuve subiendo a todos de nivel para decidir a quien llevaba, sino esto podría ser una carnicería a las puertas del final del juego. Por poca vida que le quede, no creo que sea fácil de sacar si esos tres personajes (que además son tus propios descartes) están por debajo de nivel 16.

Una vez le hemos quitado la vida que le quedaba, el combate no se acaba, sino que los personajes inmovilizados se liberan, juntando pro primera vez a los siete en el mismo campo de batalla, y tenemos un turno extra para hacer un último ataque con cada uno.


Con cada uno de nuestros ataques, vamos cortando la carne que une a Oersted con el monstruo, hasta liberarle por completo. El monstruo vuelve a inmobilizar a todos, ahora a los siete de golpe, quedando únicamente Oersted para dar el golpe final.


Aunque tocaría escandalizarse porque de repente Oersted se ha vuelto bueno, realmente lo que estoy entendiendo es que ha logrado librarse de su odio y enfrentarse a él, pero el monstruo sigue siendo parte de sí mismo. Es decir, que no había ninguna fuerza oscura que le estuviera utilizando ni mierdas de ésas...

Comienza el ending. Oersted reconoce que todo lo que ha ocurrido es culpa suya, en el sentido de que se dejó llevar y al final terminó siendo esclavo de sus propios deseos no consumados. 

El personaje que hayas elegido hablará con él. Le dice que está muy bien desear cosas y perseguirlas, pero que, básicamente, lo que hay que tener siempre es cabeza. Saber analizar las situaciones y sobreponerte cuando las cosas no salen como quieres, porque al final esa fuerza de voluntad será lo que le acompañe durante el resto de su vida.  


Oersted cae al suelo y su cuerpo se desvanece. Al final, consiguió morir en paz consigo mismo. En pantalla, sale un mensaje que deja claro que lo que le ha pasado a Oersted le podría pasar a cualquiera si se dan las circunstancias, porque la semilla del odio reside en todos nosotros.


Muy bien. Buen mensaje. Nada de un malo malísimo con delirios de grandeza, ni de un poder superior que controla tu voluntad. Simplemente una persona normal que se ve arrastrada por las circunstancias, como nos podría pasar a cualquiera. Además, que haya encontrado la paz no le redime de sus actos, y se lo han cargado igual. Muy bien llevado todo. 

Cada personaje vuelve a su época, y vemos una pequeña escena de lo que ocurre con cada uno. Pogo tiene un bebé, Li abre una escuela para transmitir sus habilidades a las nuevas generaciones, Masaru se muda, y algunos es que directamente no les pasa nada, siguen con sus vidas. Créditos y fin.


Increíble que esto sea un juego a 1994... Qué bien construido y llevado todo. Se agradece sobre todo, la ruta con Oersted, que permite empatizar y leer el final de una forma muy distinta. Buen antagonista y, más importante aún, buen mensaje. Estamos mucho más cerca de lo que parece de acabar en la cárcel o muertos. Parece muy difícil, pero al final, estamos en este mundo unos 30.000 días, con que se junten las variables adecuadas solamente en uno de esos 30.000 días, podemos acabar muy mal. Luego cuando pasan tragedias, todo el mundo habla del criminal diciendo que parecía una persona normal, que saludaba todas las mañanas y te abría la puerta al salir, mientras se llevan las manos a la cabeza por lo que ha hecho. Y es que lo era. Y lo sigue siendo. Porque a cualquiera de nosotros nos puede pasar. ¡Tened cuidado! 

Valoración Global del Final
I'll Remember the Ending
Dramatic Finish
Decisive Finish
Brave Finish
Sophisticated Ending
An Ending to Get Over
 Refrain Ending
Fateful Ending
Strepitoso Ending
Liar Ending



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