¡Hora de mezclar bebidas y cambiar vidas!
Como preámbulo, por si hay alguien que no conozca el título, Valhalla es un bar queer al que acude gente de toda clase y condición sexual, y en el que manejamos a una camarera que está enamorada de su jefa, enfrentándose al día como cualquiera de nosotros. Va al trabajo, paga sus facturas, tiene sus distracciones, sus antojos, y su pasado, que es lo que debe enfrentar en este final. Ha quedado con su ex-cuñada para hablar de su ex-novia muerta. Eso no es todo lo que tiene que pasar en este final, pero sí la base de la parte. ¡Adelante!
Nochevieja. Ya Jill empieza mal. Tiene que currar ese día jaja pero bueno, para un bar es una noche clave, la que más, sólo por debajo de los churreros. Dana debe irse a terminar los preparativos de la fiesta de fin de año, pero como ve a Jill muy nerviosa, le promete un fuerte abrazo cuando todo acabe.
Al quedarse sola ante su destino, Jill no tarda en recordar ese prometido abrazo para darse ánimos y no salir corriendo. Por suerte o por desgracia para ella, Gaby no tarda en aparecer.
Tras algo de titubeo, Jill toma la palabra. Le enseña a Gaby la carta cerrada que recibió de Lenore. Jill abre la carta delante de Gaby, para que la lean juntas, cuando descubre que simplemente pone Lo siento.
Tras algo de titubeo, Jill toma la palabra. Le enseña a Gaby la carta cerrada que recibió de Lenore. Jill abre la carta delante de Gaby, para que la lean juntas, cuando descubre que simplemente pone Lo siento.
Ambas quedan decepcionadas por el contenido de la carta. Sin embargo, hay que verlo en perspectiva. Cuando pasa tanto tiempo, realmente dan igual los detalles, lo que importa es el gesto, y encontrarte en tu lecho de muerte es un buen empujón para cualquier gesto. Y seguro que incluso así le costó bastante enviar esa carta.
Gaby defiende a su hermana. Cuenta que ella se sintió mal por presionar a Jill, por pensar sólo desde su punto de vista y demás. Jill también se sincera y comenta que ha pensado en qué hubiera pasado si se hubiera calmado en ese momento, o si se hubiera disculpado antes, pero que nunca lo hizo porque tenía miedo. Y aquí viene la mejor frase de todo el final. Gaby echa la bronca a ambas, porque las dos pensaban lo mismo, y ninguna tuvo el valor de volver y disculparse. ¿Cuántas veces nos pasa eso en la vida real?
Jill decide cambiar el enfoque de la conversación. En lugar de lamentarse, decide seguir adelante. Invita a Gaby a una bebida (sin alcohol, por supuesto) y como sabe que Lenore las estará viendo desde el cielo, promete a su difunta pareja cuidar de su hermana.
Finalmente, brindan por ella, y Gaby logra por fin sonreír. Jill tiene el detalle de invitar a Gaby tanto a la fiesta de Nochevieja del bar como a dormir en su casa después. Créditos.
¿Ya? Esto no puede acabar todavía. Si falta solucionar lo de Anna y saber la verdadera identidad de Gill. De momento, al final de los créditos Gaby y Jill hablan un poco antes de dormir. Parece que Dana sí le dio el prometido abrazo a Jill jaja
Vale, esto sigue. Tocan los character endings. En el primero, Virgilio cuenta su papel el día del asalto al banco y sus motivos para ayudar a Sei y a Stella. Después hay una conversación entre Jill, Gaby y Alma un poco subida de tono. En tercer lugar, Dorothy nos cuenta que ha podido hablar con su madre, y le ha contado un poco sobre su auténtica hija. Su nombre era Anna.
Anna tenía la misma enfermedad que Lenore, pero logró superarla. Muy bien, ya sabemos quien es, ¡pero hay más! También nos cuentan que mantuvo una relación con Lenore, a la que conoció cuando estaban en el hospital. No dicen su nombre directamente, pero está clarísimo. Es la novia de su exnovia jaja
Al contrario que Lenore, Anna logró superar la enfermedad, e incluso se sacó la universidad estando en el hospital, pero al salir la atroplelló un camión y murió... Lo curioso es que Dorothy, en vez de pensar que fue una pena que muriera así, dice todo lo contrario. Alaba a Anna en el sentido de que la enfermedad no pudo con ella y que tuvo que entrar en juego nada más y nada menos que la fuerza de un camión para echarla abajo. Es otro enfoque...
Por último, Gill aparece despidiéndose de Jill y Dana, porque se van de viaje juntas. No te dicen expresamente que ahora sean pareja, eso cae a la imaginación de cada uno, así que yo voy a votar que sí. Dana deja a Gill vivir en casa en su ausencia, y hasta le deja una caja de condones por si quiere traerse a alguna jaja que crack es esta mujer jaja
Y todavía hay más. Después del final se desbloquea una escena adicional de la noche de año nuevo. Gaby duerme, y Jill conversa con Anna. No lo he comentado porque no me parecía especialmente relevante, pero todos los character endings que acabamos de comentar tienen una fecha propia, y todos son bastante posteriores al 1 de Enero, luego en esta escena que vamos a ver, Jill todavía no sabe quien es Anna.
Anna felicita a Jill por haber dejado atrás un oscuro capítulo de su pasado, y a su vez le propone jugar a un juego de preguntas. Podemos preguntar a Anna qué es o cuanto de su historia es cierta. Ya sabemos quien es, pero igual ese qué hace referencia a cómo se manifiesta, así que voy a darle ahí. Luego cargo y le doy a la otra opción :p
Desgraciadamente, Anna no aclara las dudas, porque alega que ni ella lo sabe. Dice que salió del hospital, algo la golpeó, y luego se volvió así.
Ahora le toca a Anna. Y va al grano, porque pregunta si Jill está enamorada de Dana. No tiene reparos en contestar que sí, pero duda a la hora de reconocer si tendría relaciones sexuales con ella, cosa que tiene claro que sí haría con Alma. Anna se burla de Jill diciendo que tiene un amor adolescente.
Sigue el interrogatorio. Jill pregunta por qué sólo ella puede ver a Anna. La respuesta es que es mentira, y que simplemente es la única que puede verla dentro de su entorno. También comenta que cuando entró por primera vez en el bar y la vio, pensó que era guapa y deseó poder tener contacto con ella, luego la propia voluntad de Anna también afecta.
Luego está la otra teoría, que sea porque era la novia de su exnovia, y ahí esté el vínculo que las une. A mí, desde luego, si me viene a visitar un fantasma que fue la siguiente pareja de alguna ex, no me haría ni puta gracia, las cosas como son...
Anna pregunta qué tal la fiesta, y Jill contesta que bien, que Gill trajo a su novia, y que todavía está flipando de quién es, ¡pero no nos lo dice! Aunque a mí fliparía más saber qué hacía los días que desaparece del bar...
Finalmente, Jill se sincera y le dice a Anna que si quiere venir a molestarla de vez en cuando, puede hacerlo. Acepta la existencia de Anna e incluso la llama por su nombre, algo que hace mucha ilusión al fantasma. A su vez, Anna le pide que le abra la puerta para marcharse, para sentirse como una persona viva y no un fantasma al que le basta con desaparecer. Jill acepta, detalle que Anna agradece, se despide y se va. Ahora sí, fin.
Al final ha estado bien. Me han dicho casi todo lo que quería saber. Ha faltado saber la identidad secreta de Gill, pero sinceramente, era mucho más importante lo de Anna.
Pero esta vez toca una conclusión un poco diferente de lo habitual. Cyberpunk Bartender Action VA-11 HALL-A, no es para nada mi tipo de juego. Suelo buscar experiencias que no pueden darse en el mundo real, porque las que sí se pueden dar, prefiero vivirlas en el mundo real y no en un videojuego. No tiene niveles, no tiene ataques especiales, no tiene plot twists, no tiene muertes dramáticas en directo, ni viajes en el tiempo, ni magias, ni decisiones de cambian el destino de todos. Es un juego normal que te cuenta la historia de gente normal con problemas normales y sus relaciones con los demás, como en el mundo real, por mucho que esté ambientada en el futuro. Y está bien. Me ha gustado y me alegro de haberlo jugado. El problema viene a la hora de empatizar con el juego. A la hora de captar ese mensaje de que hay cosas que hay que hacer, o que hay que decir en su momento, y no dejar que el orgullo lo impida o lo retrase, porque puede llegar un día en el que directamente ya no puedas hacerlo. Hay una escena muy buena en Big Bang Theory, cuando Leonard le pide consejo a Sheldon sobre un problema con Penny, y éste le contesta: Dentro de cien años ya no importará porque los dos estaréis muertos.
Da la casualidad de que yo soy super nazi cuando pasan estas cosas, y cuando tengo una movida gorda con alguien, sea pareja, familia o amigos, de esas que terminas dejándote de hablar con la otra persona, lo primero que hago, como medida de seguridad, es borrar el teléfono de la otra persona, para que, si se me pasa el enfado o me entra la culpa con el tiempo, aunque quiera, no pueda contactar la otra persona, y tenga que ser ella la que necesariamente se ponga en contacto conmigo (cosa que evidentemente tampoco ocurre nunca) si quiere arreglar las cosas. Porque, aunque yo la haya liado, (pues cuando hay un problema serio siempre es culpa de los dos bandos y no exclusivamente de uno) la otra persona la ha liado tanto o más que yo, así que no tengo por qué arrastrarme por nadie. Es una buena receta para la soledad jaja
Así que, me siento un poco gilipollas por haber jugado a este juego, que me ha intentado mandar un mensaje de concordia, y en mi interior seguir defendiendo mi postura nazi de inflexibilidad total, alegando únicamente que si cualquiera de esas personas hubiera querido arreglar las cosas, se habría puesto en contacto conmigo, y como no lo han hecho, es que no merecen la pena. Lo mismo que pueden decir ellas de mí.
Y por ende, es un tanto hipócrita que le de una valoración positiva a un final que se basa en un mensaje que ni aplico ni comparto en la vida real. Hay un pequeño monólgo de Berto Romero que trata el tema de la hipocresía, aunque enfocado a otros ejemplos completamente distintos, que es la verdadera lección que yo he aprendido con este final.
Gaby defiende a su hermana. Cuenta que ella se sintió mal por presionar a Jill, por pensar sólo desde su punto de vista y demás. Jill también se sincera y comenta que ha pensado en qué hubiera pasado si se hubiera calmado en ese momento, o si se hubiera disculpado antes, pero que nunca lo hizo porque tenía miedo. Y aquí viene la mejor frase de todo el final. Gaby echa la bronca a ambas, porque las dos pensaban lo mismo, y ninguna tuvo el valor de volver y disculparse. ¿Cuántas veces nos pasa eso en la vida real?
Jill decide cambiar el enfoque de la conversación. En lugar de lamentarse, decide seguir adelante. Invita a Gaby a una bebida (sin alcohol, por supuesto) y como sabe que Lenore las estará viendo desde el cielo, promete a su difunta pareja cuidar de su hermana.
Finalmente, brindan por ella, y Gaby logra por fin sonreír. Jill tiene el detalle de invitar a Gaby tanto a la fiesta de Nochevieja del bar como a dormir en su casa después. Créditos.
¿Ya? Esto no puede acabar todavía. Si falta solucionar lo de Anna y saber la verdadera identidad de Gill. De momento, al final de los créditos Gaby y Jill hablan un poco antes de dormir. Parece que Dana sí le dio el prometido abrazo a Jill jaja
Vale, esto sigue. Tocan los character endings. En el primero, Virgilio cuenta su papel el día del asalto al banco y sus motivos para ayudar a Sei y a Stella. Después hay una conversación entre Jill, Gaby y Alma un poco subida de tono. En tercer lugar, Dorothy nos cuenta que ha podido hablar con su madre, y le ha contado un poco sobre su auténtica hija. Su nombre era Anna.
Anna tenía la misma enfermedad que Lenore, pero logró superarla. Muy bien, ya sabemos quien es, ¡pero hay más! También nos cuentan que mantuvo una relación con Lenore, a la que conoció cuando estaban en el hospital. No dicen su nombre directamente, pero está clarísimo. Es la novia de su exnovia jaja
Al contrario que Lenore, Anna logró superar la enfermedad, e incluso se sacó la universidad estando en el hospital, pero al salir la atroplelló un camión y murió... Lo curioso es que Dorothy, en vez de pensar que fue una pena que muriera así, dice todo lo contrario. Alaba a Anna en el sentido de que la enfermedad no pudo con ella y que tuvo que entrar en juego nada más y nada menos que la fuerza de un camión para echarla abajo. Es otro enfoque...
Por último, Gill aparece despidiéndose de Jill y Dana, porque se van de viaje juntas. No te dicen expresamente que ahora sean pareja, eso cae a la imaginación de cada uno, así que yo voy a votar que sí. Dana deja a Gill vivir en casa en su ausencia, y hasta le deja una caja de condones por si quiere traerse a alguna jaja que crack es esta mujer jaja
Y todavía hay más. Después del final se desbloquea una escena adicional de la noche de año nuevo. Gaby duerme, y Jill conversa con Anna. No lo he comentado porque no me parecía especialmente relevante, pero todos los character endings que acabamos de comentar tienen una fecha propia, y todos son bastante posteriores al 1 de Enero, luego en esta escena que vamos a ver, Jill todavía no sabe quien es Anna.
Anna felicita a Jill por haber dejado atrás un oscuro capítulo de su pasado, y a su vez le propone jugar a un juego de preguntas. Podemos preguntar a Anna qué es o cuanto de su historia es cierta. Ya sabemos quien es, pero igual ese qué hace referencia a cómo se manifiesta, así que voy a darle ahí. Luego cargo y le doy a la otra opción :p
Desgraciadamente, Anna no aclara las dudas, porque alega que ni ella lo sabe. Dice que salió del hospital, algo la golpeó, y luego se volvió así.
Ahora le toca a Anna. Y va al grano, porque pregunta si Jill está enamorada de Dana. No tiene reparos en contestar que sí, pero duda a la hora de reconocer si tendría relaciones sexuales con ella, cosa que tiene claro que sí haría con Alma. Anna se burla de Jill diciendo que tiene un amor adolescente.
Sigue el interrogatorio. Jill pregunta por qué sólo ella puede ver a Anna. La respuesta es que es mentira, y que simplemente es la única que puede verla dentro de su entorno. También comenta que cuando entró por primera vez en el bar y la vio, pensó que era guapa y deseó poder tener contacto con ella, luego la propia voluntad de Anna también afecta.
Luego está la otra teoría, que sea porque era la novia de su exnovia, y ahí esté el vínculo que las une. A mí, desde luego, si me viene a visitar un fantasma que fue la siguiente pareja de alguna ex, no me haría ni puta gracia, las cosas como son...
Anna pregunta qué tal la fiesta, y Jill contesta que bien, que Gill trajo a su novia, y que todavía está flipando de quién es, ¡pero no nos lo dice! Aunque a mí fliparía más saber qué hacía los días que desaparece del bar...
Finalmente, Jill se sincera y le dice a Anna que si quiere venir a molestarla de vez en cuando, puede hacerlo. Acepta la existencia de Anna e incluso la llama por su nombre, algo que hace mucha ilusión al fantasma. A su vez, Anna le pide que le abra la puerta para marcharse, para sentirse como una persona viva y no un fantasma al que le basta con desaparecer. Jill acepta, detalle que Anna agradece, se despide y se va. Ahora sí, fin.
Al final ha estado bien. Me han dicho casi todo lo que quería saber. Ha faltado saber la identidad secreta de Gill, pero sinceramente, era mucho más importante lo de Anna.
Pero esta vez toca una conclusión un poco diferente de lo habitual. Cyberpunk Bartender Action VA-11 HALL-A, no es para nada mi tipo de juego. Suelo buscar experiencias que no pueden darse en el mundo real, porque las que sí se pueden dar, prefiero vivirlas en el mundo real y no en un videojuego. No tiene niveles, no tiene ataques especiales, no tiene plot twists, no tiene muertes dramáticas en directo, ni viajes en el tiempo, ni magias, ni decisiones de cambian el destino de todos. Es un juego normal que te cuenta la historia de gente normal con problemas normales y sus relaciones con los demás, como en el mundo real, por mucho que esté ambientada en el futuro. Y está bien. Me ha gustado y me alegro de haberlo jugado. El problema viene a la hora de empatizar con el juego. A la hora de captar ese mensaje de que hay cosas que hay que hacer, o que hay que decir en su momento, y no dejar que el orgullo lo impida o lo retrase, porque puede llegar un día en el que directamente ya no puedas hacerlo. Hay una escena muy buena en Big Bang Theory, cuando Leonard le pide consejo a Sheldon sobre un problema con Penny, y éste le contesta: Dentro de cien años ya no importará porque los dos estaréis muertos.
Da la casualidad de que yo soy super nazi cuando pasan estas cosas, y cuando tengo una movida gorda con alguien, sea pareja, familia o amigos, de esas que terminas dejándote de hablar con la otra persona, lo primero que hago, como medida de seguridad, es borrar el teléfono de la otra persona, para que, si se me pasa el enfado o me entra la culpa con el tiempo, aunque quiera, no pueda contactar la otra persona, y tenga que ser ella la que necesariamente se ponga en contacto conmigo (cosa que evidentemente tampoco ocurre nunca) si quiere arreglar las cosas. Porque, aunque yo la haya liado, (pues cuando hay un problema serio siempre es culpa de los dos bandos y no exclusivamente de uno) la otra persona la ha liado tanto o más que yo, así que no tengo por qué arrastrarme por nadie. Es una buena receta para la soledad jaja
Así que, me siento un poco gilipollas por haber jugado a este juego, que me ha intentado mandar un mensaje de concordia, y en mi interior seguir defendiendo mi postura nazi de inflexibilidad total, alegando únicamente que si cualquiera de esas personas hubiera querido arreglar las cosas, se habría puesto en contacto conmigo, y como no lo han hecho, es que no merecen la pena. Lo mismo que pueden decir ellas de mí.
Y por ende, es un tanto hipócrita que le de una valoración positiva a un final que se basa en un mensaje que ni aplico ni comparto en la vida real. Hay un pequeño monólgo de Berto Romero que trata el tema de la hipocresía, aunque enfocado a otros ejemplos completamente distintos, que es la verdadera lección que yo he aprendido con este final.
Valoración Global del Final
Perfecto
Casi Perfecto
Muy Bueno
Bastante Bueno
Bueno
Aceptable
Malo
Bastante Malo
Muy Malo
Un Desastre
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